Última prueba del Trofeo de
Navidad.
Salimos de Combarro con la
sospecha de que la regata se podría suspender. A motor, a la altura de la Isla de Tambo sufrimos el
primer aviso, nos entró un chubasco que llevó el anemómetro hasta los 40 nudos
y nos hizo pensar en lo que pasaría sí nos coge con todo el trapo izado.
Llegamos a la zona de salida,
el viento amainó hasta los 20 nudos previstos y se inicia el procedimiento.
Frenamos y aceleramos el barco tratando de consumir los minutos que restaban
para el bocinazo inicial. Veinte segundos y arrancamos, tenemos al Chispa a
barlo, nos aproximamos a la línea, vamos lanzados y demasiado altos, en los
últimos 5 segundos arribo pensando que sólo Pepe la cruzaría antes de tiempo. Suena
la señal y lo hace por segunda vez. Nombran al Chispa y para nuestra desgracia
también al Enxuto.
Tenemos espacio para retomar,
todo lo contrario que Pepe al que otro barco lo hace mantener un rumbo que lo distanciaba
de la salida. Navego en sentido inverso y volvemos a comenzar avisando al
comité por VHF, ya estamos navegando en ceñida cuando nos comunican que el
Enxuto y el Chispa todavía no habían retomado. Estábamos seguros de que ya lo
habíamos hecho pero tuvimos que volver a arribar y volver a cruzar la línea.
Nos encontramos ciñendo
nuevamente con velocidad y negociando las rachas, pasamos a los malotes del
Porto de Marín en un instante y al Grifo le recuperamos toda la ventaja que nos
llevaba.
Tomamos Morrazán e iniciamos
la popa con rumbo a Tambo, el Grifo iza Spi y sale planeando, el Chispa hace lo
mismo pero no corre mucho más que nosotros, miro hacia popa y veo el chubasco
acercándose, decido no izar spi por precaución y a los cinco minutos el viento
aumenta. Chito revienta su spi y al poco
tiempo Pepe destroza el suyo. Nosotros seguimos estables y los pasamos, en ese
momento el mar se aplana y se vuelve blanco, la velocidad del viento y del
barco se disparan, vamos a 11.5 nudos sostenidos con Eolo soplando hasta los 50, sin visibilidad perdemos
todas la referencias. En medio de todo esto nos cruzamos con el Nocturne que
venía ciñendo totalmente volcado sobre su costado de estribor. Se hizo eterno, seguíamos
lanzados sin ver hacia donde íbamos y lo que es peor, sin saber sí la jarcia
aguantaría ese esfuerzo.
El chubasco se
retiraba y dejaba paso a otro escenario, aparece el Ozoaqua a motor, al
Aguieria sin velas, escuchamos avisos por radio de barcos que se retiraban.
La verdad que a toro pasado y en la barra del club es hasta divertido contarlo, pero fue muy duro para las tripulaciones y los barcos sufrieron una tremenda paliza.
La verdad que a toro pasado y en la barra del club es hasta divertido contarlo, pero fue muy duro para las tripulaciones y los barcos sufrieron una tremenda paliza.
Superamos la baliza de la
isla y comenzamos la ceñida con rumbo a Pelados, que resolvemos sin problemas y
velocidad. Al doblarla veo que no hay amenaza de chubasco e izamos el balón, la
velocidad aumenta, nos separamos de Grifo y Chispa rápidamente.
POR BABOR tomamos la amarilla de
sota, salimos en esa amura y alargamos el bordo mientras resolvemos los
problemas de escotas que nos impedían virar. Cambiamos de amura y ceñimos con
esa elegancia que derrocha el Mítico.
Nos gritan desde el Sebrala de Froiz, nosotros
les saludamos pensando que nos jaleaban por lo bien que íbamos… Pero no era
eso, nos decían que la de Tambo tendríamos que haberla tomado por estribor…
Mierda, abrir velas y en popa desandar nuestros pasos, viendo como nuestros
rivales nos recortaban toda la ventaja que teníamos con ellos.
El final ya os lo podréis
imaginar, entramos de terceros pero con la media de las otras pruebas
conseguimos un segundo puesto.
Enhorabuena a Pepe del Chispa
por la merecida victoria, al Grifo por un tercer puesto que le sabrá a poco
pero menos es nada… Sentimos lo de los Malotes del Porto de Marín, pero no era
su día (ni el de Pedro). Enhorabuena al Ozoaqua por lograr el premio al mejor
barco del año, no nos hubiese gustado ganarlo aprovechándonos de su
desgracia y otro año siendo el segundo mejor barco no se puede considerar un
mal resultado.
Un diez para la tripulación
del Enxuto que supo devolverlo a Combarro sin haber roto nada, destacando la
pareja de bañera Oscar Torres/Paco Álvarez derrochando energía y los de proa
Cris Prego/Juanma magníficos en un día muy complicado.
*Esta entrada también la voy
a utilizar para despedir a Juan, el grandísimo proa del Mítico que por motivos
sentimentales (el amor le puede) deja España y lo hacemos deseándole lo mejor.
Dos fueras de línea, una boya que me como, no me extraña el título de esta entrada. Que no se ofenda nadie, porque si haciéndolo así quedamos segundos.....wir mythischen (admito los dos fueras de línea pero la boya por babor......
ResponderEliminarQuique